#HISTORIAS DE REUTILIZACIÓN
Vestidos hechos con sacos.
En las épocas más deprimidas de la historia son los tejidos más humildes los que se abren paso creando nuevos usos y costumbres.
En la gran depresión de los años 30 en EEUU muchas mujeres empezaron a confeccionar vestidos con feedsacks (sacos de harinas y grano).
Algunos productores, al conocer esta situación, empezaron a vender sus productos en nuevos sacos hechos de algodón de diferentes estampados y colores.
Esta costumbre se popularizó tanto que hasta se organizaban desfiles y se extendió a las cortinas, bolsos, fundas de cojines…
Las revistas y las empresas de patrones publicaban ideas y diseños que incluso se llegaron a incluir en los propios sacos. Se calcula que en 1942 había unos 3 millones de estadounidenses de todas las clases sociales que vestían con prendas hechas con sacos.
En la década de 1950 comenzaron a utilizarse sacos de papel, que eran mucho más baratos que el algodón, y se inició el declive de aquellas telas estampadas y funcionales. La II Guerra Mundial acabó con la cultura de la reutilización y el aprovechamiento.
En 2016, la escritora y editora Linzee Kull McCray publicó el libro Feed Sacks: The Colorful History of a Frugal Fabric, un volumen que se presentaba envuelto en diferentes papeles que reproducían esas telas y que rescataba la historia de este fenómeno con infinidad de datos y fotografías. Hoy en día, debido a la gran emergencia medioambiental que vivimos, reciclar vuelve a ser una opción en la moda.